He estado repasando las matemáticas con mi hija Nerea. La lección trata de potencias y raíces cuadradas así que he tenido que explicarle a la niña que su padre NUNCA supo hacer raíces cuadradas.
Por cierto, sacaba buenas notas en matemáticas cuando tenía que resolver ecuaciones de 2º grado a pesar que no nos dejaban utilizar las calculadoras.
¡Imaginaos a qué velocidad era capaz de multiplicar!